Se propone la idea de una multi-autoría -o coautoría- del arte nacida entre la obra y el espectador, partiendo de entender la mirada de éste como un acto creativo.
La intención de este texto es mostrar cómo los Acuerdos de San Andrés de 1996 permiten pensar cuestiones en torno a la categoría de pedagogía descolonial en México.